Todos deseamos una piel sin manchas sin arrugas e hidratada. El arroz contiene vitamina B3, ésta posee propiedades blanqueadoras de la piel, por lo que elimina el color oscuro de las posibles manchas en la piel y además previene que aparezcan de nuevo.
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El sérum de arroz se ha popularizado en redes sociales debido a que esta semilla milenaria, proveniente de China, tiene grandes beneficios para la piel, por ejemplo, estimula la producción de colágeno, contiene grandes cantidades de vitamina E, oryzanol gamma y protege a la dermis contra el daño solar.
Por otro lado, existen sérums de arroz comerciales hechos con esencia de germen de arroz blanco, estos prometen mantener la piel con un buen balance de humedad, mejorar la aspereza provocada por la resequedad, así como a restaurar la elasticidad de la dermis. Si eres amante de la cosmética esta puede ser una una buena opción, siempre y cuando primero lo consultes con tu dermatólogo, por otro lado si eres amante de los productos naturales, te decimos cómo hacer un sérum de arroz casero.
El sérum de arroz casero funciona como tónico facial, usándol por dos meses, podrás reducir las manchas, acné y arrugas. Los efectos son inmediatos, ya que aporta hidratación profunda dejando la piel con textura suave y disminuye manchas en la piel de manera progresiva; por otro lado, ayuda a las pieles grasas a controlar la producción de sebo.
Ingredientes:
1 taza de arroz
1 vaso y medio de agua, preferiblemente si es destilada
Un recipiente con tapa
Un escurridor
Modo de preparación:
Deja reposar el arroz en el agua durante toda una noche para que vaya soltando sus nutrientes y propiedades. Al día siguiente, tan solo tendrás que colar la mezcla para separar el arroz del agua y quedarte con esta última, que es la que utilizarás a modo de tónico facial.
Otras alternativas de agua de arroz
- Tónico para piel grasa: prepara agua de arroz y rocíala en la cara todos los días, después de la limpieza facial.
- Mascarilla contra el acné: mezcla 3 a 4 gotas de aceite de ricino, agrega 1 cucharada de harina de arroz y 10 gotas de agua de rosas. Aplícalo en tu cara limpia y déjalo reposar durante unos 5 minutos. Enjuague con agua fría.
- Exfoliante: licúa un puñado de arroz, hasta obtener un grano fino agrega una cucharada de aceite de almendras y frota suavemente sobre el cutis y enjuaga con agua y jabón.