Bajar el tamaño de nuestra cintura y eliminar la grasa es un reto enorme, para lograrlo se debe combinar ejercicios de fuerza tres veces a la semana durante tres meses y además es muy importante una alimentación adecuada para lograr los cambios que buscamos.
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Lo primero que debes hacer es cambiar tus hábitos alimenticios, incluir una rutina de entrenamiento diario en tu vida. Te aconsejamos eliminar la comida procesada y la comida chatarra; elimina o reduce el consumo de alcohol y bebidas azucaradas; bebe por lo menos dos litros de agua al día; opta por más frutas y verduras; evita comidas fritas y alimentos altos en azúcar.
Si sigues estas tres técnicas de entrenamiento es posible quemar grasas a la vez que se aumenta el tono muscular para conseguir un vientre plano. Es my importante trabajar por completo la musculatura del abdomen y acelerar el metabolismo para potenciar una mayor quema de calorías.
1- La Plancha
Este ejercicio consiste en se realiza colocando el cuerpo en posición horizontal con respecto al suelo, apoyando los antebrazos y las puntas de los pies. Se debe mantener el cuerpo recto con el abdomen, zona lumbar, glúteos y piernas contraídos. Si en su ejecución molesta la zona lumbar o resulta difícil mantener la postura, se pueden apoyas las rodillas en el suelo en lugar de los pies y cuando deje de molestar pasar a las puntas de los pies. En el video de abajo puedes consultar cómo lo hacen los expertos.
2- Sentadillas
Separa las piernas el ancho de los hombros, imita el acto de sentarse y baja el cuerpo hasta forman un ángulo de 90 grados con las rodillas. Mantén la postura con las rodillas flexionadas durante entre 20 y 30 segundos. Este ejercicio ayuda a trabajar la flexibilidad de las caderas, a quemar calorías y bajar de peso.
3- Evita los alimentos que inflamen
Nutriólogos investigadores han dicho que los carbohidratos refinados predisponen el crecimiento de bacterias intestinales inflamatorias que pueden aumentar el riesgo de obesidad y enfermedades inflamatorias intestinales, por ello la alimentación puede contribuir a fomentar la inflamación. Evita Azúcares, grasas trans, grasas saturadas, alcohol y carbohidratos refinados, cámbialos por más verduras y frutas en tu dieta.