MENTE SANA

Síndrome de la niña buena, ¿lo padeces?

¿Vives complaciendo a los demás? Puede que sufras de este síndrome y ni cuenta te habías dado

Cómo saber si tienes el síndrome de la niña buena.Hacer cambios en tu vida te dará mucha más libertad y felicidad.Créditos: Especial
Escrito en VIDA EN FAMILIA el

Hay muchas mujeres que han pasado la gran mayoría de su vida complaciendo a los demás. Muchas con el paso del tiempo se dan cuenta de su estado emocional y cambia, pero otras más nunca perciben lo dañina que es esta situación para ellas. A esto se le conoce como el síndrome de la niña buena.

El síndrome de la niña buena se presenta en mujeres que siempre son serviciales, amables y dóciles; de esta manera buscan agradar a todas las personas que la rodean y eso con el tiempo las ha hecho perderse a sí mismas.

Son incapaces de decir que “No”, no son buenas para defenderse, no se priorizan, no saben cómo expresar su desacuerdo a una situación y mucho menos saben exigir sus derechos. Pero, ¿de qué manera una mujer comienza por sufrir el síndrome de la niña buena? ¡Te lo contamos a continuación!

¿Cómo se origina el síndrome de la niña buena?

El síndrome de la niña buena puede llegar a originarse desde la infancia y es el reflejo desigual en la educación que recibieron en casa y su entorno en general. El panorama: desde niñas aprendieron a que las mujeres deben ser buenas, educadas y tranquilas, mientras que los hombres son fuertes e independientes.

Con el tiempo el síndrome de la niña buena va volviendo sumisas a las mujeres que lo padecen y aprenden a reprimir su ira, tristeza, inconformidad y sus opiniones críticas, pues una mujer no debe causar desdenes.

¿Cómo saber si tienes el síndrome de la niña buena?

Hay algunos indicios que te pueden señalar claramente que sufres del síndrome de la niña buena:

  • Eres servicial, complaciente y eres incapaz de negarte a las peticiones de las personas.
  • Te cuesta expresar tu opinión, pues tienes miedo al rechazo y al conflicto.
  • Vives preocupada por “El qué dirán” y no te permites expresar ira o cometer errores.
  • Te colocas siempre en último lugar y te cuesta mucho trabajo hacerte valer.

Si consideras que sufres del síndrome de la niña buena es importante comenzar a hacer cambios inmediatos en tu vida y aprender a valorarte, hacerte valer, conectar con tus emociones y abandonar el papel de salvadora.

Claro que esto no es una tarea fácil y requieres de apoyo psicológico para ayudarte a vencer el síndrome de la niña buena, pero ten por seguro que con mucho esfuerzo te sentirás liberada y comenzarás a ver tu vida de otra manera.