Es muy gracioso cómo criticamos a la gente migajera por aceptar las mínimas expresiones de amor de la persona que quieren, solo porque esto les hace sentir aceptadas, pero sentémonos a reflexionar sobre cómo las otras personas contribuyen a generar esa dependencia emocional.

Parece una obviedad que si alguien te hace sentir mal, lo mejor es irse y ya está; sin embargo, no es tan fácil como escribirlo, pues en este tipo de relaciones hay varias dinámicas que comienzan a influirnos a nivel psicológico y emocional, haciendo más complicado el solo poder marcharse.

Tal como ocurre con Carrie Bradshaw de Sex in the City, nuestra migajera favorita y quien nos hacía enojar porque siempre volvía rogándole a Mr. Big que la amara e incluso aceptó ser su amante cuando él eligió casarse con otra. Aunque es un personaje muy criticado, también es una gran representación de la realidad, porque sí, es fácil criticar cuando vemos desde fuera sus acciones, pero ¿qué pasa cuando eres tú quien está en la misma situación?

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por qué aceptamos migajas de amor
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Ser migajera es una decisión, pero no toda tu culpa

La definición de “ser migajera” surgió en los bajos mundos de TikTok, donde se le empezó a llamar así a la gente que acepta “migajas de amor”, tal cual, que se conforman con que un día alguien les quiera y al siguiente no existan para esa persona. Que saben que no las elige para una relación formal aún sabiendo sus sentimientos y deciden estar ahí esperando a que cambie de opinión.

Todo esto es una serie de decisiones que, tal vez no tomamos tan conscientemente, simplemente vamos aceptando por múltiples razones, como la falta de amor propio, la baja autoestima, el cómo aprendiste a relacionarte con las demás personas. En Carrie Bradshaw vimos muchas de estas características, pues es un personaje necesitado de atención y que toda su vida es un caos: no tiene estabilidad económica, es vulnerable al amor (¿y quién no?) y busca vivir una vida de cliché en Nueva York.

Aunque hasta este punto todo parece tu culpa porque eres quien no rompe ese lazo aún sintiéndote fatal con esa relación, la otra persona también tiene responsabilidad, pues está aprovechando esta vulnerabilidad para sacar provecho.

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Ser migajera es ser dependiente emocional
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¿Cómo se aprovecha la otra persona de alguien que acepta migajas de amor?

El aprovecharse de estar con una persona migajera puede tener diferentes factores. De acuerdo con psicólogos, podría deberse a que le gusta sentir el control sobre ti, a temas más sobre el ego y el narcisismo (donde no quiere estar contigo, pero tampoco le gusta pensar que puedes estar con alguien más), o simplemente no quiere lidiar con una ruptura (aunque no sean nada).

Tal como Mr. Big hacia con Carrie: no la elegía, pero tampoco la dejaba, argumentando siempre que “era un hombre en busca del amor”, mientras la tenía a ella al lado dispuesta a darle todo, todo lo que él quería sí, pero no de ella.

Para que una persona migajera exista, debe haber alguien que le dé migajas de cariño, por lo que ambos tienen responsabilidad sobre cómo están viviendo ese tipo de relación dependiente de sentimientos muy frágiles de ambas partes, pues mientras uno se conforma con lo poco que le dan, el otro da poco, pero tampoco está dispuesto a soltar.

Escritora que busca acompañar con sus palabras a las personas y darles un lugar seguro; creadora de contenido para un estilo de vida digno.